Por las hijas del mundo

Porque todas somos hijas de alguien...Seguro que has pensado en tu madre al leerlo, o en tu abuela, o en esa gran mujer que te crio. Pues sí, sin ellas, nuestras antecesoras, no estaríamos aquí. Sin su lucha no serían posibles nuestras reivindicaciones. Hoy por todas y sobre todo, por ellas.

Hay gente que piensa que no debemos recibir felicitaciones este día, que es un día para reivindicar. Por supuesto, así lo creo. Aunque me gustaría dar un matiz a esa reivindicación. Es un día que cada vez está siendo más señalado. Se empieza a respetar, ( y digo se empieza, porque aún que da mucho por andar) el trabajo de la mujer en la sociedad. Eso es motivo de celebración, aunque no para bajar la guardia. Como digo queda muchísimo por hacer, queda mucho para que las mujeres no sientan que toda la carga es suya. Queda mucho para no sentirnos culpables por querer trabajar y ser madres a la vez. Y  también queda mucho para respetar a aquellas que no quieren ser madres y quieren un futuro profesional que iguale al de algunos hombres.

Ojalá nuestras nietas no tengan que conocer este día. Qué sea sólo, historia.